Almussafes combate la procesionaria de sus pinos
Personal del Ayuntamiento emprendió ayer jueves día 9 el tratamiento para combatir la plaga que cada año afecta a los ejemplares de poca altura
El consistorio municipal lleva varios años apostando por la utilización de un insecticida ecológico en sus pinares
Almussafes cuenta con más de 150 pinos en sus parques y jardines públicos del núcleo urbano y de su término municipal, todos ellos de las especies pino carrasco y pino piñonero, ambas muy susceptibles de ser atacadas por la llamada “procesionaria del pino”, que es la terminología que define a la mariposa nocturna “Thaumetopoea pityocampa” cuando se encuentra en su fase de oruga. Las orugas de las procesionarias, con su cuerpo cubierto de largos pelos, son peligrosas y extremadamente venenosas, al producir urticarias y alergias tanto en personas como en animales, principalmente en los perros. Precisamente para evitar esta problemática, anualmente el Ayuntamiento lucha contra la plaga con la aplicación de un insecticida ecológico, aprovechando para ello la mejor época de su ciclo biológico, el inicio del año. Precisamente ayer jueves, personal de la brigada de peones procedió a la aplicación del tratamiento en los distintos ejemplares de pinos afectados.
A partir de mayo empezarán a volar de nuevo ejemplares de “Thaumetopoea pityocampa”, una mariposa nocturna que todos conocemos, en su fase de oruga, como “procesionaria del pino”. Hacen sus nidos en los árboles y se alimentan de sus agujas y brotes. Cuando su número es excesivo se convierten en una plaga. A su paso, dejan un panorama desolador de pinos esqueléticos y enfermos y también consecuencias para la salud de personas y animales, principalmente irritaciones, alergias y urticarias.
En Almussafes llevan varios años evitando que se descontrolen este tipo de situaciones con acciones de prevención que se repiten anualmente. Aunque existen diferentes métodos para combatir esta plaga, el consistorio de Almussafes lleva varios años apostando por el sistema que menor daño provoca en el medio ambiente y que además tiene una efectividad probada. “De hecho, aplicamos el insecticida ecológico conocido como Bacillus thuringiensis, generalmente en los dos primeros meses del año, que es cuando el insecto se encuentra en una fase de desarrollo propicia para ser atacado por insecticidas”, explica la concejala de Medio Ambiente, Teresa Iborra.
Ayer jueves día 9, expertos de la brigada de jardinería municipal acometieron el tratamiento en los pinos de las variedades carrasco y piñonero existentes en el término municipal, concretamente en el Parque Rural, zonas verdes del polígono y sede de Protección Civil. La empresa concesionaria del mantenimiento de los parques públicos del casco urbano también aplicará este método ecológico de prevención en los distintos ejemplares existentes en los próximos días.
“No podemos evitar que, a mediados o finales de verano la mariposa de la procesionaria ponga sus huevos sobre las ramas apicales de los pinos para que sus orugas al nacer se alimenten de los brotes jóvenes de acículas, aunque sí que podemos erradicar los bolsones que albergan las larvas, dado que las orugas son peligrosas para la salud”, destaca el concejal de Obras y Servicios, Andrés López.
Las orugas de las procesionarias, con su cuerpo cubierto de largos pelos, son peligrosas ya que son urticantes. No es necesario el contacto directo, cuando se sienten amenazadas pueden lanzar sus pelos sedosos al aire generando irritaciones y alergias a personas y animales. De hecho, cada oruga dispone a lo largo de su cuerpo de unos 500.000 pelos o tricomas especiales que asemejan morfológicamente a pequeños dardos o flechas envenenados. Su pequeño tamaño y el hecho de que puedan desprenderse con facilidad implica un riesgo importante de urticaria no sólo por contacto directo sino también vía aérea a través del efecto de corrientes de viento.
Para combatir a esta plaga es fundamental conocer su ciclo biológico. Dependiendo de la climatología, a mediados o finales de verano la mariposa de la procesionaria realiza la puesta de huevos en las acículas de los pinos. Al cabo de un mes nacen las orugas que se agrupan en los característicos bolsones.
Las larvas, nacidas en el verano, pasan los meses fríos en sus bolsones situados en las ramas de los pinos, estos bolsones están hechos de hilos edosos y dentro de ellos albergan de 100 a 200 larvas. A la caída del sol, las orugas entran en actividad y comienzan su marcha en busca de comida de una manera alineada. Cuando han terminado de alimentarse o cuando el frío de la noche es considerable las procesionarias vuelven al bolsón. A finales de invierno bajan del pino para enterrarse en el suelo con el fin de transformarse en mariposas. A mediados o finales de verano salen las mariposas de la tierra y tras la cópula se produce una nueva puesta en las ramas de los pinos. La mariposa es poco conocida, puesto que solo vive 24 horas.
